Elecciones en la FIDE. Unas reflexiones finales. (Por Marcel Blanchard)

Ya se está eligiendo en estos días el nuevo presidente de la FIDE en Siberia.
No fue un tema que movilizara mucho las energías intelectuales de nuestro medio ajedrecístico del Uruguay, a veces tan afecto a las discusiones y opiniones. Extraño. No es tema menor. ¿No interesa? Mentira. No es eso.
Como ya termina todo en breve ensayamos aquí siquiera un argumento. O uno y medio a lo más. Pero nuestro. Pensado libremente. Hemos seguido el debate en varios idiomas. Hemos leído, y hemos pensado. Y hemos, como es natural, evolucionado nuestro punto de vista. Porque en temas grandes y complejos es imposible estar acertado por completo. Entonces en esos casos, conviene cierta agilidad y ligereza intelectual para estar vacunado contra el virus del patetismo.
Pensamos al momento que lo mejor para la FIDE es que el futuro presidente sea Kárpov. Anatoly Evgeniévich Kárpov 12avo campeón mundial del juego del ajedrez.
Ilyúmshinov ha cumplido un ciclo ya. Son 16 años. Se nos ocurre que es mucho. No puede ser sano para una institución que hace a todo el mundo en este caso del mundo del ajedrez. Debe de haber hecho muchas cosas bien y tantas otras mal. Inevitable. Pero el ajedrez de la FIDE a cualquiera que le siga más o menos no resulta muy creíble.
A veces en política no hay mejor modo que dejar expresarse para que alguien muestre el calibre. Uno lee el sitio oficial y los argumentos manejados y el nivel es verdaderamente bajo, se puede decir cursi. Uno lee blogs y argumentos de federaciones que le apoyan y se ve también el nivel.
No es que en el equipo de Karpóv todo sea de alto nivel. Hay demasiados signos de admiración en las frases de su sitio de campaña. Es curioso que nadie le aconsejo al respecto.

Pero…¿Cuatro años más aún Ilumshinov? Cumplirá 20 en la máxima poltrona. Las poltronas apolillan. Eso es una ley humana casi. Empiezan por apolillar las asentaderas siguen hacia arriba y terminan apolillando el cerebro. Como se dice entre los muchachos del barrio: - “Mijo, en serio, ya está, ya está bien. Abra un poco el juego ahora…y pélese cuanto antes que le va a hacer un bien a todo el mundo”

Kárpov ha trabajado toda su vida como dirigente y reúne una inmensa experiencia profesional, humana. Cuenta con el activo apoyo de su antiguo archirrival. Y eso exponencia las posibilidades de hacer algo bueno que tienen. Máxime que son dos personas con temperamentos casi opuestos.
Kárpov es un símbolo viviente que trasciende el mundo del ajedrez. Y eso no es poco. Abrirá muchas puertas importantes al encerrado círculo del ajedrez. Ilyumshinov cuando lo trasciende da la impresión que es para pasar vergüenza. El dinero a millones, el poder a montañas y el petróleo, no aseguran la calidad de un dirigente de por sí.

No nos parece por otra parte correcto, manejar como argumento solapado que Ilyumshinov sostenga que el ajedrez es traído desde fuera a la Tierra. Dar la información de que lo hizo es correcto, porque lo hizo. Pero insinuarlo como argumento es otra cosa. Puede el kalmuko creer eso y aun muchas cosas más y sin embargo ser un excelente presidente de una federación mundial de jugadores del juego del ajedrez. Son dos cosas distintas. No es todo tan lineal. Si cada uno de nosotros se animara a contar todo lo que piensa de todas las cosas lo mas probable es que todo el mundo restante saliera huyendo del espanto y quedaría un universo de locos solos. Uno por planeta. Y no podríamos ya mas jugar al ajedrez con piezas que se puedan tocar y relojes a golpear como tanto nos gusta y darnos la mano al inicio y al final de las partidas.
No, nos parece que Ilyumshinov sea ningun demente. Loco no es lo mismo que demente. Ojalá hubiera muchos mas de los que hay por ahí. Porque loco...¿con respecto a qué?
No nos parece incluso sea un hombre de mal. Asi a secas. Ha vivido metido en la lógica de su país que no es fácil. Y de la historia de su país. Y es co-creador pero también producto de ello. Es, por ejemplo budista, cosa que me resulta bien simpática por distintos motivos, y uno no es budista ni nada. Conocimos hace algún tiempo su República, su gente, sus ajedrecistas. Estuvimos en las oficinas de su gobierno y en las comisarías de su policía y entre la gente de a pie y en los pin-pones de los kalmukos, los armenios y los chechenos , los georgianos, los rusos, que viven allí en paz en la ciudad kalmuka perdida en la estepa. Hablamos con todos ellos. Y aunque uno es un simple andante y puede estar comiendose cosas enormes, claro, no nos dio en resumen la impresión que fuese  un tipo de mal. Otra cosa es que haga bailar a todo el mundo del ajedrez a su personal compás. Tendría que ser budista y abandonar al fin de cuentas su ego y su poltrona. Aunque hay que aceptar que las mentalidades asiáticas tienen otra concepción de los tiempos políticos y las eras y los eones. Pero no todos somos asiáticos :)

Kárpov y Kaspárov también tiene sus zonas oscuras y las tuvieron más oscuras aún. ¿Quién no?
Pero creemos pasa todo por otro lado. No siempre es mejor un cambio en todo y porque si porque un cambio. Pero a veces sí. Es una dialéctica. Se nos ocurre que cuatro periodos esta ya bien para Ilyumshinov, y máxime mirando los resultados.

Kárpov con Kaspárov no parece fuesen a hacer mucho daño a la FIDE en el estado del ajedrez actual. Es una renovación a tiempo, no solo del presidente actual sino de toda la estructura burocrática.
Poseen colosal energía, poseen inmensa experiencia profesional y humana y si desean ponerlo al servicio del ajedrez mundial institucionalizado parece algo muy bueno. Hasta parecería una evolución natural de las cosas con toda la fuerza que eso implica. Kárpov ha dirigido varias organizaciones importantes de difusión del ajedrez a lo largo de toda su trayectoria. No es solo un jugador de ajedrez, porque con eso no alcanzaria y hasta podria ser contraproducente. Ser jugador de ajedrez no garantiza que se sea un buen dirigente de ajedrez. El puntaje de ELO básicamente refleja la fuerza en el juego del ajedrez. A lo sumo unas determinadas capacidades específicas de las que se requieren para jugar al juego del ajedrez. Pero no refleja la inteligencia en varias otras de sus distintas expresiones, ni la capacidad humana ni la calidad y lucidez política que necesita un dirigente. Karpov seria un buen presidente porque además de ser ex campeón del mundo es un político y puede ser dirigente de alto nivel. El haber sido uno de los campeones del mundo de ajedrez clásicos -probablemente el anteúltimo- le da sí, una autoridad inmensa dentro y fuera del mundo del ajedrez donde se encuentra el apoyo que se necesita para que viva y prospere la práctica del juego. Ambos K son una leyenda viviente pero no solo leyenda, siguen creando y viviendo y tienen mucho para dar aún.
Porque también está Kaspárov en el baile. Kaspárov que por las motivaciones que fuese desde hace unos años se ha movido en la arena política rusa algo que no es juguete. Algo mortalmente peligroso. Y ha mostrado algo que pareciera la práctica de algún otro deporte desarrolla, con garantía total, un tanto más que la del ajedrez: huevos. Sí, huevos. Como se dice para que se entienda sin lugar a dudas. En ruso se dice igual: "iaítzi" que quiere decir lo mismo literal y figuradamente que en español. Esto es: ir más allá de sí y poner en riesgo todo lo suyo, aunque uno tiemble por dentro. No hablamos de la fuerza física. Hablamos de otra cosa.Porque con el poder no se bromea en Rusia. Entonces uno se saca el sombrero con Kaspárov. En Rusia ha sido demonizado como lo fue en su momento Trotski y luego tantos otros hasta el mismo Korchnoi. Al mismo Kárpov allí le esta costando políticamente su acercamiento a Kaspárov. Y ahi está Kaspárov aún. Dinero no necesita. La gloria ya la tocó al igual que Kárpov. Es de pensar que ha crecido como ser humano y busca también otras cosas. El ajedrez institucional mundial puede estar necesitando y mucho una aproximación como la de Kaspárov a las cosas. Por supuesto, esto sin decir una palabra de lo que significa el nombre y la energía dentro del nombre, de Kaspárov, en ajedrez dentro y fuera del mundo del ajedrez: Garry Kaspárov.

Karpov y Kaspárov…. ¿Qué me contursi?...nada del otro mundo para la FIDE :)

Aunque no siempre es aconsejable manejar este tipo de razonamientos porque en sí no es un argumento, nos llamó con fuerza la atención y hasta emocionó que el archienemiguísimo de Kárpov, mucho más en serio que Kaspárov, porque fue a muerte, el leningradense ya anciano Víctor Lvóvich Kórchnoi, diga que Kárpov tiene mucho para darle al ajedrez mundial y es bueno sea el nuevo presidente… Uno se queda mirando unos instantes a la nada y sintiendo muchas cosas y exclama por lo bajo…”Qué lo parió!”

Estas cosas pensando en global. No en términos de la federación uruguaya. En términos del ajedrez global.
¿De qué se va a beneficiar concretamente la FUA y cada uno de los jugadores que hacen a los clubes del Uruguay en cada caso? No lo sé. No lo sé si gana Ilyumshinov. ¿Hay algo que indica que prestará más atención de la que haya prestado en 16 años? No lo sé. ¿Alguna ganancia digamos “táctica” de tiro corto? Puede ser. No lo sé. Pero lo corto es corto…no mucho más que eso.
¿Y qué si gana Kárpov? Tampoco lo sé. Probablemente sea más o menos lo mismo para nosotros.
¿Pero lo es para el ajedrez en total? Ahí está el centro de la cuestión a nuestro entender, a la hora de una votación de este tipo. Porque también somos parte del ajedrez global.